Este carbón contiene gran proporción de microporo con diámetro más adecuado para la eliminación de moléculas pequeñas, consiguiendo excelentes resultados en la decloración de agua, eliminación de ozono, eliminación de sabores y olores y retención de contaminantes orgánicos de bajo peso molecular como fenoles, detergentes, entre otros. El agua a tratar debe estar libre de aceites, mataría en suspensión y hierro para alargar su vida útil.